Paso un fin más en que me quedo en casa, trabajando, pero sin nada más que hacer, y no es queja, disfruto mucho el tiempo conmigo pero también disfruto aprender o practicar cosas, es algo en lo que no pensé cuando insistí en cambiarnos de domicilio.
A más de la mitad del contrato, que se va rapidísimo, por cierto, me doy cuenta que desaceleré mi ritmo de vida muy de golpe, y es que, aunque pasaba horas en el tráfico, siempre había algo que hacer saliendo del trabajo, el café con mis amigas, las clases de baile, las reuniones virtuales (esas no cuentan porque las puedo seguir haciendo, pero si cuentan porque ya no están en mis rutinas), Kimy, extraño mucho tenerla más cerquita a pesar de que hablamos a diario. Los viernes eran de salir, que a las 5 me escribieran "avísame cuando llegues y pasamos por ti", por acá no me he dado la tarea de buscar clases de nada, no tengo amigos que vivan cerca, bueno si pero igual no tienen disponibilidad, y mi roomie no jala a varias cosas, además de que ha llegado tardísimo a casa, lo que suma a mis fines solitarios, también tardes sola en casa.
Se lee más dramático de lo que es, no me siento sola, más bien, el cambio de rutina es muy evidente, ahora tengo horarios para hacer ejercicio, ver pelicular, pasear a mis creaturas, la noche de skincare a la semana, he practicado mucho más con la guitarra y amo no desaprovechar la oportunidad de ir a conciertos, obras, o el cine, cada que puedo, eso sin duda era algo imposible con los +30 km de distancia que debíamos recorrer para llegar a casa.
Mi roomie parece más tranquilo, ya no le estresa el horario de salida y creo que comienza a tener amigos. El sábado pasado visitamos Aztlán, con un par de sus amigas del trabajo, lo vi contento y en general me la pase bien, aunque sea un poquitin más complicado tratar con ingenieros..
Los cambios han sido buenos para todos, aunque aun no me juego mi +4 agradezco haberme vuelto a acostumbrar a pagar renta, así será más sencillo después que termine este contrato.
Me siento mucho más descansada, con más energía, me mejoró bastante el humor (y como no, si no dormía nada) lo cual me tiene más inquieta, igual y vuelvo a estudiar, o mejoro mi inglés, o me inscribo al gym, o todo, y aunque me encantaría tener un plan fijo con alguien, me toca disfrutar del tiempo conmigo y de las ocasiones que coincido con mi roomie.
Siempre he sido muy cuidadosa con mi tiempo, es lo único que nos pertenece y que no regresa, me gusta invertirlo en cosas que disfrute hacer o con personas que disfrute estar, eso me hace parecer un poco ermitaña, porque me es muy sencillo decir que no, por eso, aunque hay propuesta de planes, prefiero seguir pensando en lo buena que es la vida cuando la compartes con los que te importan, y un circulo muy pequeño de personas y yo, me importan muchísimo.
Por ahí escuche que volverse selectivo es parte de la edad, que cerca del tercer piso comienzas a amar tu casa y la gente con la que convives son siempre los mismos y no sé, parte de mi siempre ha sido así, y me gusta la fiesta, salir, conocer, en general soy muy inquieta, pero si el plan es con la gente de mi circulo para mi es un absoluto si, contrario a que si soy complemento de alguien en una reunión, no quiere decir que no me adapto, solo que la confianza al pasártela bien es muy diferente dependiendo con quien te compartes.
Uno de mis propósitos silenciosos de este año fue dejar un poco el teléfono, invertía mucho tiempo a platicar con amiguis, mucho chat y emojis, para finales del año pasado me di cuenta (muy Sherlock Holmes de mi parte) de que, aunque muchas veces yo no iniciaba las conversaciones, sin duda al menos el 80% de las veces era yo quien las mantenía, preguntando, contando cosas, reiniciando el interés y no a la fuerza, sino por mi personalidad, entonces deje de hablar con muchas personas, y es que, no quiero entretener a nadie, quiero "relaciones" mutuas, que la gente con la que me interesa hablar quiera hablar conmigo de manera autentica. desde entonces mi teléfono dejo de sonar activamente, supongo que la gente no sabe como iniciar una conversación conmigo o simplemente no les interesa y bueno, así estoy bien. Vamos bien con ese ese propósito, ahora disfruto más de salir con las personas, poder dedicarles tiempo y mantener únicamente chats que "fluyan" y dejar que se apague quien se quiera apagar.
Tenia un punto con esto ..
Ah bueno, que los cambios de hábitos sin duda influyen en las personas, cambiar de código postal me dio más tiempo para cuestionarme todo, no se si las profundas investigaciones que realizo sobre temas como la inteligencia artificial, salud mental, educación de los hijos, a que países y lugares específicos me encantaría viajar o cual Nintendo switch debo comprar, beneficien a la humanidad, pero seguro se que me gusta aprender y que debo aprovechar el interés de una mente inquieta.
Igual y pronto me arutino (ni siquiera estoy segura de que exista la palabra) de nuevo o con suerte encuentro a alguien que jale a nuevos planes, que proponga, que entienda que quien tiene mi confianza adquiere también mi disponibilidad para ir desde un paseo, una peli, teatro (de preferencia, ya que ese asiento a mi lado lleva vacante un buen rato) hasta salir un fin del país si se arma un buen plan. Pero bueno, a la gente le gustan sus rutinas y es mejor que tarde, si ese bestie va a valer completamente la pena.
Y ya, fin de la pausa para procrastinar, continuemos con nuestra programación de adulto funcional.
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