He pasado un fin de semana maravilloso, y Kimy tiene todo que ver con eso. El viernes pasado fue su cumpleaños, la conozco lo suficiente para saber que andaba con ganas de que no le importara solo por miedo a que los demás no les interese lo suficiente, pero quizá olvidó que mientras yo esté en este mundo jamás le faltará todo mi entusiasmo y emoción por festejar su vida. Y así fue, la desperté a las 00:00 hrs, para ser la primera persona en felicitarla, como acostumbro con las personas que amo, ella agradeció, y volvió a dormir, sin tener idea de que llevo semanas planeando su fin de semana de cumpleaños. Aunque la idea original era ir a la playa, con el mood del último viaje que hicimos y que tanto nos gustó, cuando el huracán la desanimó tuve que resolver y así fue como le planee el desayuno sorpresa con todas sus hijas, las flores que siempre le envío, su comida favorita en su lugar favorito y corrí después del trabajo para llevarla a cenar. El plan suena simple pero la ...